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en un mundo cada vez más conectado

Desafíos, tendencias y soluciones para la protección de la privacidad

En la era digital en la que nos encontramos, plagada de la cultura del dato, la privacidad se está convirtiendo en un campo de batalla crucial. A medida que aumenta la conectividad global, distintas industrias se enfrentan a desafíos únicos para proteger la información personal y confidencial de los clientes.

Desafíos actuales

La personalización de los productos o servicios es una de las tendencias que llevamos viendo desde hace unos años con el objetivo de hacer productos únicos y exclusivos.

Para la personalización de estos productos o servicios se requiere la recopilación de ciertos datos personales. Desde preferencias de estilo hasta ubicaciones, detalles financieros, etc. Esta acumulación de datos presenta un riesgo significativo en caso de filtración; cuantos más datos se recopilan, mayor es el peligro de que esta información sensible se vea comprometida. Además, el aumento del uso de tecnologías conectadas, como los dispositivos IoT. Muchos de estos dispositivos conectados a internet y a otros dispositivos carecen de medidas de seguridad robustas, haciéndolas vulnerables a los ciberataques.     

tendencias emergentes

  • Encriptación de los datos avanzada
  • Blockchain para la autenticidad y privacidad. Esta tecnología permite a las marcas ofrecer un historial transparente y verificable del producto sin comprometer los datos personales del cliente.
  • Regulaciones más estrictas. El reglamento general de protección de datos (RGPD) de la UE ha establecido un precedente, y se espera que países de todo el mundo implementen leyes más estrictas en torno a la protección de datos personales.

Soluciones para la protección de la información

Para abordar estos desafíos, las organizaciones deben adoptar un enfoque proactivo y centrado en la tecnología a través de:

  • Auditorías de seguridad de manera regular para identificar y mitigar las vulnerabilidades dentro de los sistemas y productos conectados.
  • Capacitar a los empleados sobre las mejores prácticas de seguridad cibernética, ya que muchas veces, el eslabón más débil en la seguridad de la información es el factor humano.
  • Colaborar con empresas tecnológicas especializadas en ciberseguridad para desarrollar soluciones a medida que se integren sin problemas dentro de los valores de la marca.

            El futuro de la privacidad está intrínsecamente ligado al avance de las tecnologías de protección de la información, es decir, de la ciberseguridad. A medida que el mundo se vuelve más conectado, la adopción de nuevas tecnologías puede ser un avance para todas las empresas, pero no hay que olvidar que estos avances deben realizarse de manera consciente y manteniendo la privacidad y protección de los datos del cliente.